LA FRASE

Me gustaría tener el tiempo necesario para disfrutar de tu compañía. Tú deberías tener la suficiente curiosidad para permanecer a mi lado y leerme de verdad.

miércoles, 19 de octubre de 2011

"MAMA QUIERO SER COMO TU"


Si alguien te mira a los ojos, te sonríe y te dice “Mamá, quiero ser como Tu”, se te hace un nudo en la garganta, y si esto te lo dice tu propia hija adolescente, entonces una extraña sensación te invade y una simple frase se convierte en toda una declaración de intenciones.

Entonces me doy cuenta que existe una personita que me mira cada día, me escucha, presta a tención de todo aquello que digo y hago. Me ve cuando me levanto por las mañanas y cuando llego de trabajar, me observa atentamente y se va empapando de cosas que observa de mi forma de hablar y de actuar.

Me conoce desde hace 12 años y aún así le parezco lo suficientemente interesante como para llegar a la conclusión de que no estoy tan mal y que merece la pena parecerse a mí.

Entonces me da por pensar y llego a la conclusión de que soy yo la quiero parecerme a ella. Es una persona que se está haciendo día a día, se va formando y se hace mayor. Aprende cada día, absorbe como una esponja todo lo que hay a su alrededor. No envidio su juventud porque ahora estoy en una etapa distinta de mi vida, no envidio sus ganas de vivir porque yo me siento exactamente igual que ella, pero sí que envidio su gran sabiduría.

Siempre he pensado que tener un hijo es algo realmente difícil, educarlos, guiarlos, ayudarles a que se conviertan en grandes personas. Pero jamás he querido que ninguno fuera como yo soy o como yo me veo. Los adultos nos juzgamos, nos etiquetamos y casi siempre vemos antes las cosas feas que no las cosas buenas. Pero cuando un hijo te mira y reconoce que le gustas, valoras mucho más el amor que sienten hacia ti, porque son capaces de ofrecer su amor de forma incondicional.

Pero yo quiero ofrecerle alguna cosa más, quiero ser perfecta para ella, quiero que me mire y siga viendo cosas buenas en mí, así que hago una lista mental de todas aquellas cosas que hago mal, como refunfuñar demasiado, enfadarme sin razón o hacer el payaso y que se sienta ridícula a mi lado.

Nuestros hijos nos hacen ser eternos, gracias a ellos podemos vivir hasta el infinito y nos retornan la sensatez que vamos perdiendo con los años. Dicen que nuestra sociedad es una sociedad sin valores, que se está perdiendo el sentido del respeto a los demás y que sobre todo, los jóvenes, se mueven por puro egoísmo. Pero no debemos olvidar algo importante, nuestros hijos son nuestro propio reflejo, somos nosotros los que debemos enseñarles, y ser un ejemplo para ellos ha de ser nuestra prioridad.

Así que, mi mensaje va dirigido a todas aquellas personas que tienen hijos, y que viven sus vidas ejerciendo el mal por sistema. A todos aquellos que hacen daño a los demás, a los que su propio egoísmo no les permite ver la maldad que sus acciones conlleva, yo les haría pensar que sus hijos ven lo que están haciendo y aprenderán de ellos porque son sus padres, y cuando sean mayores, si no se pone remedio, serán seres malvados y egoístas y harán las misma cosas que han aprendido de sus propios padres.

Yo por si acaso quiero aprender y no cometer errores, quiero mejorar y quiero aprender de mis hijos porque ellos son el futuro, y ellos aún conservan cosas que yo hace tiempo que dejé olvidadas…

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